Hemos dicho fin a las sesiones de comuniones de este año y toca ponerse las pilas con otros trabajos e intentar enseñar trabajos de estos meses en los que hemos estado más ausentes de lo que nos gustaría.
Vamos a empezar con unas cuantas fotos de fotografía infantil en estudio, ¡allá vamos!
Cuando conocí a Amets y Nahia acababan de cumplir un añito y apenas empezaban a sostenerse en pie. Ahora, un año después, corretean de un lado para otro sin miedo a nada y divirtiéndose como solo hacen los enanos. Además, nos demostraron que entre ambos hay una conexión y complicidad especial, como suelen decir propio de los mellizos.
Os mostramos una pequeña selección de la sesión:
Asteburu ona izan!!