La sesión de Alain y Aiert nos hacía mucha ilusión pues hace aproximadamente 3 años, cuando Alain era pequeño, vino al estudio. (Aquí podéis ver esa sesión.) Este año organizamos la sesión de fotos en exterior y conocimos a Aiert, el pequeño bichito de familia.
Normalmente planeamos los detalles y decorados que utilizaremos en cada reportaje. Pero con los niños no siempre sale tal y como lo habíamos previsto. La improvisación de los pequeños es los que hace diferente cada sesión de fotos.
Los gestos y su forma de ser forma parte del juego y cuando conseguimos que sean ellos mismos consideramos que hemos tenido éxito en la fotografía infantil.